Elaboración

Pelar los duraznos en agua hirviendo, quitarles el carozo y procesar la pulpa.
Medir 3 tazas (el resto usar para otra preparación).

Poner la pulpa en un bol y mezclar con la sal, el azúcar, el jugo de limón y la esencia de almendras, si gusta. Dejar reposar la mezcla, revolviendo de vez en cuando, hasta que el azúcar esté bien disuelto.

Batir ligeramente la crema de leche hasta que espese un poco.
Agregar a los duraznos y mezclar bien.

Verter en molde y congelar a frío máximo.

Cuando el helado esté firme, desmóldelo, córtelo en trocitos y licúelo o procéselo hasta que esté espumoso.

Volver a poner en el molde y estacionarlo en el freezer hasta que esté firme.

Servir en copas, espolvoreando la superficie de c/u con las almendras fileteadas y tostadas.

¡Un manjar!