Cheesecake light

El clásico postre americano, en versión reducida en calorías. Puede acompañarse con una salsa de frutillas, preparada con frutillas maceradas en edulcorante y reducida a fuego mínimo
Elaboración
Disolver la gelatina sin sabor en 5 cucharadas de agua y llevar a fuego hasta que hierva.
En otro bowl batir 3 claras a punto nieve, agregar la gelatina disuelta y seguir batiendo; luego agregar el queso blanco y colocar en un molde desmontable.
Mantener durante 1 hora en la heladera, aproximadamente.
Decorar con frutas a gusto o servir con una salsa preparada con frutillas maceradas en edulcorante y un chorro de agua, cocinada a fuego bien bajo y revolviendo ocasionalmente. Dejar enfriar y servir con la cheesecake.
Ingredientes
- 500 g de queso blanco descremado
- 1 cucharada de vainilla
- 2 cucharadas de edulcorante
- Ralladura de 1 limón
- 7 g de gelatina sin sabor
- 3 claras