Elaboración
La leche es un líquido nutritivo de color blanquecino, producido por las hembras de los mamíferos. La principal función de la leche es la de alimentar a los hijos hasta que sean capaces de digerir otros alimentos: es el único alimento de las crías de los mamíferos hasta el destete, y sería deseable que también lo fuera de las crías de los humanos en sus primeros meses de vida.
Se entiende como leche al producto integral del ordeño total e ininterrumpido, en condiciones de higiene que da la vaca lechera en buen estado de salud y alimentación. Esto además, sin aditivos de ninguna especie.
La leche es la base de numerosos productos lácteos como la manteca, el queso o el yogur. Numerosos subproductos de la leche son utilizados en las industrias agroalimentarias, químicas y farmacéuticas: leche concentrada, leche en polvo, caseína o lactosa.
Alimento indispensable
Está compuesta principalmente por agua (87%), materia grasa, proteínas, hidratos de carbono (lactosa) y calcio. La leche entera de vaca es una importante fuente de vitaminas (A, B, D3, E). La vitamina D es la que fija el fosfato de calcio a dientes y huesos, por lo que se hace especialmente recomendable a los niños.
Un vaso de 250 ml de leche bovina aporta la cantidad diaria recomendada de calcio (44%), vitamina A (20%) y vitamina D (50%).
Usos habituales
La leche puede consumirse sola, en infusiones, licuados, batidos y para elaborar helados, postres, flanes, budines, tortas. Es la base de la famosa salsa bechamel (blanca), ingrediente fundamental en el entrañable arroz con leche y aporte de suavidad y textura para un clásico de la cocina uruguaya: el matambre a la leche.
También en la industria cosmética
Cleopatra tomaba baños de leche y miel para mantener su piel suave y sedosa. Hoy en día todavía se utiliza para enriquecer champúes, suavizantes, jabones, cremas y productos de baño. Muchos de los trucos de belleza de nuestras abuelas incluyen leche para suavizar talones, calmar ojeras, demaquillarse o calmar las piernas luego de la depilación.