Elaboración
Limpie los alcauciles. Córtelos en láminas y resérvelos en agua y limón para que no se oxiden.
Pique la panceta y dore con 40 g de manteca.
Agregue los alcauciles, salpimiente y siga cocinando a fuego moderado por espacio de 15 minutos, añadiendo caldo de vez en cuando.
En una cacerola, derrita la manteca restante, adicione la ricotta desmenuzada, revuelva con cuchara de madera y cocine un minuto a fuego lento.
Incorpore los alcauciles con todo el jugo de la cocción y continúe cocinando un minuto más.
Mientras, en un bowl, bata los huevos con el queso rallado y la pimienta. Vierta el batido sobre los alcauciles e incorpore todo.
Mientras tanto, cocine la pasta en agua hirviendo con sal. Cuele al dente, una a la mezcla de los alcauciles y sirva.
Foto: Flickr | Fabio Ingrosso