Elaboración

Esta preparación es para frutas de tipo carnoso (pelones, ciruelas, uvas y kiwis).

Lavar, pelar y cortar las frutas en cubitos.

Rociar con jugo de limón.

Colocar los cubitos en una cacerola con agua a fuego moderado hasta que estén blandos.

Escurrirlos y ponerlos a cocina con almíbar y miel hasta hervir.

Repetir la operación, tantas veces como sea necesario, hasta que los cubitos queden transparentes.

Retirarlos y ponerlos sobre una rejilla para que se sequen.

Espolvorear con azúcar impalpable.

Envasar.

Para frutas cítricas:

Colocar las cáscaras en un recipiente con agua salada.

Macerar en la heladera durante 1 semana.

Escurrirlas y cocinarlas hasta que estén tiernas.

Escurrirlas nuevamente y ponerlas a cocinar con almíbar y miel hasta hervir.

Repetir la operación, tantas veces como sea necesario, hasta que las cáscaras queden transparentes.

Retirarlas y ponerlas sobre una rejilla para que se sequen.

Espolvorear con azúcar impalpable.

Envasar.

 

Frutas desecadas

Lavar las frutas, pelar y cortar en rodajas.
Quitar las semillas.

Acomodar sobre bandejas y llevar a horno (45 a 60ºC) con la puerta entreabierta, hasta deshidratar.
Si fuera necesario dar vuelta la fruta.

Comprobar la sequedad presionando con los dedos.
No se debe notar humedad, y los trozos parecen "crujientes".

La completa deshidratación es muy importante porque toda humedad que retenga crean moho.

Guardar en envases de vidrio esterilizados, sin apretar, y con cierre hermético.

Mantener en lugar fresco, seco y oscuro.

Nota: La fruta utilizada debe estar madura y firme al tacto.