Elaboración

En una licuadora colocar los huevos, la manteca derretida, sal, harina, leche y un chorrito de agua con gas. Licuar hasta que esté todo bien integrado.

Llevar la preparación a descansar en la heladera por 30 minutos.

Una vez transcurrido el tiempo, encender una hornalla a fuego medio y colocar una sartén con un poco de manteca hasta derretir. Cuando esté bien caliente, cubrir el fondo con un poco de azúcar y distribuirle por encima las manzanas, previamente peladas y cortadas en rodajas. Sobre ellas colocar la masa a cocinar.

Una vez que se haya separado bien de los bordes y el fondo, dar vuelta sobre un plato.

Tip: lo mejor es servirla tibia con una bocha de helado de crema y un toque de azúcar impalpable.

Receta de: Inutilisimas.com

Sobre la manzana

Hay cientos de recetas con manzana que abarcan tanto preparaciones dulces como saladas.

Es una fruta súper práctica para sumarla a la merienda, como colación o postre, y hay para todos los gustos; hay quienes la prefieren bien dulces y arenosas y otros con un toque ácido y más firmes.

Según lo explica el nutricionista argentino Diego Sívori, aporta dos tipos de fibras diferentes. La primera es la fibra soluble, que se encuentra principalmente en la pulpa y colabora en dar saciedad y retener y disminuir la absorción de sustancias perjudiciales en el estómago.

La segunda es la fibra insoluble, que se ubica prioritariamente en la piel de la manzana, y genera un efecto de arrastre que colabora en la prevención de la constipación.

Contiene vitamina A, C y B-9. Además, presenta potasio y fósforo.

Una buena idea es rallarla y utilizarla como sustitución de azúcar en algunas preparaciones dulces. Si bien no va a quedar igual de dulce que si usamos solo azúcar o miel, se puede probar combinando un poco de ralladura con otro de azúcar; de esa manera logramos una preparación más saludable.